Maricela y Dansina, cada día van conociéndose mejor. Dansina, dentro del miedo que le da encender el fuego, intenta hacer lo que puede pero con la buena maestra que tiene, va sobre ruedas.
Lucas, ya es capaz de sentarse en el servicio, por medio de un suplemento que hemos comprado.
Y Lucas, en cuanto merienda, pide irse a la calle. Se pone en la puerta y no se mueve de ahí.
Se dan sus paseos por el barrio, Lucas corre detrás de las palomas y ya se sube en los juegos infantiles.
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